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Psic. Clínica, Emilia Nin de Cardona
17/07/2024
A lo largo del mundo existen diferentes culturas, diferentes creencias y formas de ver la vida, así como también la muerte. El duelo es algo inherente la ser humano, lo único certero que sabemos es que en algún punto nos encontraremos con la muerte y es aquí en donde vienen las diferentes formas de abordarlo, en México se celebra el día de los muertos, en Madagascar los muertos abandonan sus tumbas cada 7 años para celebrar y en el campo de Chile se celebra un funeral con una fiesta y un asado. Si bien estas son formas de honrar la muerte, es la perdida misma la que se celebra y se ve -a la larga- como algo natural, pero ¿qué pasa cuando entendemos todo cambio como una especie de muerte que necesita ser honrada y celebrada a su manera?
Generalmente tenemos una visión negativa de los cambios, huimos de estos y de lo que no nos gusta al respecto (como por ejemplo evitar hablar de la muerte o verlo como algo malo), sin embargo, al naturalizar estas ideas, al ver cada vez mas seguido los cambios como algo parte de un proceso natural, se puede comenzar a interiorizar el ritual de duelo adaptado a cada uno de estos. Después de una pérdida importante iniciamos un camino de fases que, si bien son subjetivas para cada persona, permite tener un recorrido en donde socialmente se aceptan las emociones que conllevan, se acepta el tiempo que se necesite para adecuarse a este cambio y se permite a cada persona vivir el duelo a su manera, por esto mismo es importante ver los cambios (no solo la muerte) como un proceso natural necesario de tiempo, amabilidad y adecuación a cada persona para ser asimilados.
Cada cambio implica un nivel de sufrimiento, por muy pequeño que sea, es la ruptura a la rutina diaria, a las creencias y a lo conocido lo que va a generar un tipo de incomodidad que necesite una readaptación y una nueva forma de interiorizarlo y es esta manera de verlo que permite no problematizar las consecuencias de este sufrimiento, que permite la amabilidad necesaria para comprender las consecuencias de este cambio y el cómo podemos afrontarlo.
La palabra "duelo" deriva de una palabra latina que significa "dolor". Los rituales ayudan a aliviar la carga del sufrimiento después de una pérdida importante, proporcionando un espacio para la reflexión, el recuerdo y la búsqueda de consuelo. Por esto mismo te dejamos los beneficios que se tienen de entender el ritual de duelo como una idea mas grande y que abarque todas las veces que necesites de un tiempo para pararte después de una ciada o cambio:
No olvides que cada una/o tiene sus tiempos, sus formas de ver las cosas y de adaptarse a los cambios, la idea de ver el duelo como algo relacionado no solo a la muerte, sino que también a esto mismo, permite darnos el tiempo para digerir y ser amables con nuestros procesos. Puedes llamar a Centro Simi de Salud Emocional (SIMISAE) al 800 381 723 para recibir orientación psicológica gratuita de parte de un equipo de profesionales dispuestos a ayudarte y acompañarte con este y otros temas. El horario de atención es de lunes a viernes de 8:00 a 20:00 hrs y sábados de 8:00 a 16:00 hrs.