Psic. Clínica, Danitza Zúñiga

10/10/2024

Comúnmente, asociamos el duelo a la pérdida de un ser querido, pero la definición psicológica es mucho más amplia. El proceso de duelo está relacionado con la pérdida, puede ser de una persona cercana, así como un empleo, una relación, un objeto significativo, etc. El proceso entre que se produce la pérdida y se aprende a vivir con ella afecta al comportamiento a nivel físico y emocional de la persona que lo experimenta y requiere la distinción necesaria para no problematizar algo que es natural.

Algunos síntomas del duelo pueden ser los siguientes:

• Fisiológicos: malestares estomacales, opresión en el pecho y garganta, sensación de despersonalización, falta de aire, debilidad muscular, falta de energía y dolor de cabeza.
• Conductuales: trastornos del sueño y alimentarios, conducta distraída, aislamiento social, evitar recordar la perdida, llorar, llevar y atesorar objetos, hiper/ hipo actividad.
• Afectivos: tristeza, apatía, abatimiento, angustia, ira, frustración, culpa, ansiedad, soledad, abandono, fatiga, impotencia e indefensión, shock e insensibilidad.
• Cognitivos: incredulidad/irrealidad, confusión, preocupación, presencia imaginaria, alucinaciones (visuales y/o auditivas) fugaces y breves, dificultades de concentración, atención y memoria, pensamientos e imágenes recurrentes, obsesión por recuperar la pérdida y distorsiones cognitivas.

Fases del duelo

Si bien existe un consenso en las fases, es necesario recalcar que cada persona vive el proceso de manera diferente, reconocer la individualidad en cada duelo es crucial para permitir un proceso natural y adecuado a las necesidades de cada persona.

1. Negación emocional: mecanismo de defensa que niega la perdida, ausencia emocional o estado de shock.
2. Enfado o ira: se intentan buscar culpables, explicaciones de lo sucedido y son habituales los reproches.
3. Negociación: se intentan buscar soluciones para comprender la pérdida.
4. Dolor emocional: cuando se empieza a ser consciente de la realidad es cuando aparece la tristeza absoluta. Se trata de una etapa vital para superar el duelo correctamente, sirve como preparación para la aceptación.
5. Aceptación: se entiende y acepta la pérdida. Se comprende que es irremediable y se empieza a ver la vida desde la perspectiva actual.

Se suele considerar que un período de 6 meses es un tiempo adecuado para sentirse mejor ante un duelo, pero pasando los 12 meses se podría considerar un duelo prolongado, por lo que es importante contar con asistencia psicológica. Es especialmente recomendable en los casos en los que no se pueda superar alguna fase por uno mismo; la psicoterapia ayudará a la persona a expresar sus emociones, trabajar la relación con el objeto de la pérdida y poder empezar a superar la misma. Recuerda que, si necesitas orientación psicológica, contáctanos al Centro Simi de Salud Emocional (SIMISAE) con un servicio gratuito de atención vía telefónica 800-381-723 y vía correo centrodiagnostico@simisae.cl. El horario de atención es de lunes a sábado de 8:00 a 20:00 hrs.